CASA BOTE

La forma nace como una gran cubierta que aísla las actividades familiares del exterior de una manera sencilla y casi primigenia, cuyas líneas compactas y suaves disminuyen las perdidas y aúnan las relaciones cotidianas. El perfil curvo y aerodinámico de los marcos que la componen, reduce el grado de oposición y por ende minimiza las infiltraciones producto de los vientos dominantes, proveyendo además una gran superficie hermética para las aguas de lluvia y el clima en general. La disposición de los recintos permite aprovechar al máximo las ganancias térmicas con una debida orientación de la vivienda. La materialidad principal es la madera, lo que asegura una baja huella de carbono a la vez que un disminuido impacto ambiental y dada su forma y estructura, una excelente construcción telúrico-resistente.